El blog de BuscoUnViaje

La tarta selva negra original de Triberg, Alemania

Torta selva negra


A los golosos probablemente les suena más el nombre de Selva Negra por la tarta (Schwarzwälder Kirschtorte) que por la región de Alemania de la que toma su nombre (Schwarzwald). Lo cierto es que es un postre mundialmente conocido a pesar de su sencillez y de que el sabor que le confiere el licor no apasiona a todos los que la prueban por primera vez.
La tarta Selva Negra tiene un aspecto que llama mucho la atención por su colorido y dimensiones. Tiene un tamaño de unos 30 centímetros de diámetro y una altura de unos 20, aunque en algunas pastelerías de Alemania la magnitud es todavía mayor. Es casi imposible no pararse ante un escaparate para desearla pues tiene una pinta realmente deliciosa.
El pastel está recubierto de crema chantillí con virutas de chocolate sobre la parte superior y adornada con cerezas, que también es uno de los ingredientes que puedes descubrir en su interior tras darle algún bocado. La masa es un bizcocho de chocolate mojado con kirsch y relleno de crema y mermelada de cerezas.

Tartas Selva Negra en el escaparate del Cafe Schäfer de Triberg (Alemania)

¿Dónde probar la tarta Selva Negra original alemana?

En los viajes a Selva Negra es muy sencillo encontrar pastelerías que te seduzcan con sus impresionantes pasteles. Además de bosques espectaculares en sus alrededores y estampas que parecen sacadas de los cuentos de los Hermanos Grimm, todos los pueblos de la Selva Negra tienen como mínimo una konditorei o pastelería para tentar a los viajeros y oriundos.
Quizá la que se ha hecho más popular por su tarta Selva Negra es el Cafe Schäfer de Triberg. Este pueblecito turístico cercano a Friburgo es célebre por albergar el salto de agua más alto de Alemania, el reloj de cuco más grande del mundo (en realidad los dos que se disputan este honor) y el Cafe Schäfer, donde Claus Schäfer conserva la receta original de su afamado postre que le transmitió Josef Keller en 1905.
A pesar de su renombre y de que hay mucha demanda, el pastelero sólo hace un par de tortas Selva Negra cada mañana, ya que tiene que el pastel debe comerse el mismo día que se elabora. El aspecto de sus tartas es extraordinario y a pesar de sus ingredientes es un postre poco empalagoso. Es casi imposible resistirse a la tentación.
Si tienes ganas de probar la tarta Selva Negra, la más famosa de Alemania, puedes hacerlo reservando este precioso viaje:

Exit mobile version