El cosquilleo previo a la visita a una de las siete maravillas del mundo moderno es inevitable. Por ello, en los viajes a Perú la subida al Machu Picchu suele realizarse en los últimos días de la ruta, porque no hay imagen que ejemplifique mejor la riqueza del país andino. La expectación es máxima, la cuenta atrás ayuda a mantener los nervios a raya y una amenazante idea comienza a rondar por nuestra mente: ¿Y si no es como lo vemos en las fotos y acaba decepcionándome?
Si esta pregunta te viene a la cabeza y en cierta manera te frena en tu decisión de visitar Perú ya puedes desecharla porque no hay viajero que no se asombre en su descubrimiento de la más preciada joya inca.
No hay discusión: en los viajes a Perú es imprescindible subir al Machu Picchu. Y el hecho de que sea un monumento tan concurrido, implica tener en cuenta una serie de aspectos que seguramente te ayudarán a que ese día, ya de por sí especial, se convierta en uno de los recuerdos más inolvidables de toda tu experiencia viajera. Por ello, ahí van 5 consejos para viajar al Machu Picchu.
1- Comprar las entradas con antelación
No te confíes, en los últimos años se ha limitado el número de personas que puede acceder al Machu Picchu (se dice que es de 4000 personas, aunque lo recomendable serían 2500 o incluso menos) ¿Qué ocurre? Que si no tenemos entradas, es probable que programemos nuestra visita a la ciudadela inca un día y que en último momento nos quedemos sin poder acceder, ¡imperdonable! Si se reserva con agencia no habrá problemas, pero los viajeros independientes podrán comprar sus entradas por Internet unas semanas antes a través de la web oficial. ¡Con el Machu Picchu no nos la podemos jugar!
2- Cómo llegar y cuánto cuesta
Aunque se puede tomar un tren desde Cusco hasta el pueblo de Machu Picchu o Aguas Calientes -el Perú Rail-, recomendamos cogerlo en Ollantaytambo, siendo el trayecto la mitad de corto y pudiendo elegir entre éste y el Inca Rail. El precio de los trenes no es barato y dependerá de la categoría en que viajemos, aunque desde luego los que prefieran primera clase deberán pagar más de 100 soles peruanos por trayecto. Pero ahí no acaba todo. En Aguas Calientes hay que tomar un bus (más o menos, unos 27 euros ida y vuelta) y, una vez ya arriba, presentar la entrada, que cuesta 128 soles, o lo que es lo mismo, unos 40 euros aproximadamente. De nuevo, en los viajes a Perú organizados por agencia nos olvidamos de hacer cálculos y preocuparnos por los traslados.
3- ¿Qué ropa llevar para viajar al Machu Pichu?
Prohibidos el calzado y prendas incómodos. No olvidemos que en el Machu Picchu hay que caminar, subir escaleras y, en definitiva, estar horas recorriendo un paraje natural por lo que la ropa deportiva o ligera es necesaria. Es aconsejable vestir con varias capas para poder quitárnoslas si hay sol y aprieta el calor y, si se viaja en época de lluvias, de noviembre a marzo, imprescindible un chubasquero o chaqueta impermeable.
4- Subir el Huayna Picchu
No todos saben antes de conocer el Machu Picchu que la montaña que aparece en todas las fotografías justo detrás de la ciudadela es el Huayna Picchu, que significa ‘montaña nueva’ en quechua. Por éste también se puede subir, y de hecho, las vistas desde lo alto de este promontorio son increíbles, además de que allí hay otras ruinas mucho menos conocidas. Si se viaja con agencia se puede pedir incluir esta visita a la excursión, sino, hay que tener dos detalles en cuenta: para acceder al Huayna Picchu la entrada es más cara -no sirve la general- y, por otro lado, y de nuevo como ocurre con el Machu Picchu, el acceso es limitado a 400 personas por día. Por cierto, sólo hay dos turnos de entrada, de 7.00 a 8.00 de la mañana, y de 10.00 a 11.00.
5- ¿Puede afectarnos el mal de altura?
Mareos, malestar general, cansancio…el mal de altura o ‘soroche’ puede manifestarse desde nuestra llegada a Cusco debido al cambio de altitud -si venimos desde Lima- entre las dos ciudades. A diferencia de lo que piensan muchos, el Machu Picchu se encuentra a menos altitud que Cusco -2.490 metros frente a los más de 3000 de la capital imperial- pero es probable que lo suframos igual. Descansar bien y, sobre todo, hacerlo en nuestro primer día en Cusco es clave, pero por si eso no es posible, destacar que las infusiones de algunas hierbas pueden paliar los efectos del mal de altura, siendo el mate de coca la más popular. Las de plantas como la ruda o la muña también podrán ayudarnos.
Si en tus viajes no te quieres perder el Machu Picchu, aquí tienes todos los circuitos a Perú con la visita a esta maravilla mundial incluida.