Tenía 11 años. Estaba en un campamento de verano, en un viaje por Canadá, al que me había llevado mi tío canadiense. Unos días eran fantásticos, otros me estresaba por no entender bien el inglés, y otros simplemente eran “días”. Hasta que una noche nuestro monitor anunció que íbamos a hacer un viaje en canoa… A partir de ese momento, todos los días fueron fantásticos, tanto los previos al viaje, como los días en la canoa, como los días posteriores: un viaje en canoa por los ríos y lagos de Canadá es de esas cosas que uno nunca olvida. Porque remar entre bosques, comer marshmallows pinchados en un palo y puestos al fuego, dormir al aire libre en la orilla de una de las islas del lago y despertar por el ruido que hacen las ardillas correteando cerca del saco de dormir, es una experiencia de esas que te hacen suspirar de alegría cada vez que las recuerdas.
¿En qué consiste un viaje en canoa?
El objetivo es muy simple: subirse a una canoa en un punto A y trasladarse hasta un punto B. Pero como con otras cosas en la vida, lo bueno no está en el objetivo, sino en lo que uno hace por el camino: remar a través de ríos y lagos de colores impresionantes, observar la fauna canadiense en todo su esplendor (ardillas, castores, aves, … incluso osos), dormir en islas en medio de un lago, en tienda de campaña o al aire libre, encender hogueras y comer lo que uno haya tenido a bien meter en las mochilas, charlar con los compañeros de viaje, dejando descansar la vista en el azul y en el verde, reflexionar…
Remar puede resultar un poco cansado al principio, pero uno se acostumbra enseguida. Además, como en una canoa van dos o tres personas, se pueden hacer turnos para colocarse en la parte trasera, que es donde se pone el que guía la canoa. Dependiendo de la ruta escogida, a veces toca “transportar” la canoa de un lago a otro… Esta parte es la menos divertida del viaje, puesto que hay que descargar la canoa, trasladar todo (sobre la espalda) hasta el siguiente lago y llevar en volandas (sobre la cabeza) entre varios la canoa hasta el punto donde se reanuda el viaje. Un viaje en canoa no es para personas perezosas, pero tomándose el trayecto con calma y disfrutando del momento, incluso los poco aficionados a la actividad física conectarán rápidamente con esta forma de viajar.
¿Cómo organizar el viaje en canoa por Canadá?
Hacer un viaje en canoa por los lagos o ríos de Canadá no es barato, pero para los amantes de la aventura controlada y tranquila hay pocos lugares que ofrezcan tanto por tan poco. La mejor opción es confiar en un experto en Canadá que organice viajes de este tipo desde tu lugar de residencia. Él se encargará de todo.
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Más información sobre viajes en canoa por Canadá
- Un foro sobre viajes en canoa por Canadá (en inglés, lógicamente).
- Puedes combinar tu experiencia en canoa con otros lugares fundamentales de los viajes a Canadá.
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La foto utilizada en este post tiene una licencia Creative Commons y pertenece a Jeff Pang