Ciudades
de salida
Madrid/Barcelona
Volvemos a Túnez. Después de su “primavera” el país ha entrado en una nueva etapa donde el
espíritu colectivo está acompañado de la esperanza en un futuro mucho mejor. Ponemos desde
aquí nuestro “granito de arena” (nunca mejor dicho) para colaborar con nuestros amigos tunecinos
en esta nuevo discurrir de la historia.
Nuestra ruta, el tradicional recorrido que llevamos varios años realizando nos lleva a un Túnez
diferente, lejos de los caminos más trillados. Un viaje en el que combinaremos el impresionante
legado histórico y arqueológico de Túnez con la belleza de sus paisajes saharianos. Puede que Túnez
sea el país más pequeño del norte de África, pero su situación estratégica le ha asegurado una rica
historia. Fenicios, romanos, vándalos, bizantinos, árabes, otomanos y franceses han intervenido en
la región en algún momento de su historia. Túnez está en el corazón del Mediterráneo, en el punto
de confluencia del Mundo Árabe, de África y de Europa. Desde las épocas más remotas, los
tunecinos llegaron a tejer lazos comerciales y culturales estrechos con los demás pueblos del
Mediterráneo. Fundada en el año 814 antes de la era cristiana, Cartago, metrópoli brillante y
dinámica, prosperó tanto que terminó atrayendo las codicias del imperio romano, entonces en
plena expansión. La caída de Cartago en el siglo II antes de la era cristiana señaló el comienzo de la
dominación romana que duró cerca de 700 años. Los numerosos sitios arqueológicos, esparcidos
por todo el territorio tunecino, y conservados con mucho esmero, dan prueba del lugar
preeminente que ocupaba Túnez en el antiguo imperio romano. En el transcurso del los siglos V° y
VI° de la era cristiana, la influencia romana dejará sitio a los Vándalos, y más tarde, a los Bizantinos.
En el siglo VII de la era cristiana, la conquista islámica se extendió a Túnez. La ciudad de Kairouán
será el centro de la vida religiosa y la sede de una de las mezquitas más antiguas y más veneradas
en el mundo islámico. En el transcurso de los siglos siguientes, la civilización islámica aportaba a
Túnez, bajo el reino de cinco dinastías sucesivas, riqueza y prosperidad.
País abierto y hospitalario, Túnez presenta una verdadera mezcla donde las culturas berebere,
árabe, africana y europea se han conjugado para forjar una identidad cultural tunecina única en su
género. En nuestro viaje vamos a la búsqueda de las mil fachadas de este país comenzando por
Dougga, donde encontraremos las ruinas del asentamiento romano más antiguo de Africa.
Continuaremos hacia los palmerales de Tozeur, junto al impresionante lago salado de Chott el
Djerid. Realizaremos un recorrido en camello hacia las dunas de Zaafrane para alojarnos en jaimas
junto a los arenales y donde nos sumergiremos en la magia del desierto a la vez que pasaremos el
fin de año…, continuaremos por Matmata y las viviendas trogloditas para, después, extasiarnos con
las maravillas de la histórica e impresionante ciudad de Kairouan: mezquitas, mercados, medina…,
antes de regresar y pasear por los zocos de Túnez.