¿Qué ver en Chile?

Qué hacer y ver en un viaje a Chile

• La naturaleza y la adecuación de ésta para la práctica de deportes de aventura está tan presente en el país que uno de los grandes atractivos que ver en Chile se centra, precisamente, en recorrer sus interminables parajes de montaña. Las cimas andinas ofrecen posibilidades inacabables para practicar el alpinismo. Eso sí, deberá contarse con gran experiencia e incluso así asumir ciertas dosis de riesgo. Los Andes no son una broma e incluso escaladores experimentados han perdido la vida mientras los exploraban.

• Los glaciares y campos de hielo del sur son otros de los puntos interesantes para el viajero, desde el punto de vista paisajístico y también desde el de las actividades que pueden realizarse. Son populares las rutas de senderismo por la Patagonia chilena: cruzar ríos y acampar en lugares de belleza insuperable pagarán sobradamente el esfuerzo.

• Otro importante destino chileno donde es común realizar senderismo es el Parque Nacional de las Torres del Paine. Sus moles graníticas, de 2000 metros, se convierten, asimismo, en el sueño (o quizá la pesadilla) de cualquier escalador. En él existe una gran variedad de entornos naturales, desde montañas con cumbres que alcanzan los 3000 metros , hasta lagos, ríos, valles y glaciares, conformando panorámicas realmente espectaculares.

• Como unos de los lugares preferidos por los viajeros cabe mencionar los desiertos de los altiplanos con sus infinitas lagunas secas y escenarios lunares. Como principal exponente se encuentra San Pedro de Atacama, en cuyos alrededores se ubican atractivos turísticos de primer nivel como los Géiseres del Tatio y el denominado Valle de la Luna, separado del pueblo por tan sólo 12 kilómetros.

• Santiago de Chile, la capital, merece también una pequeña dedicación por parte del viajero. Y es que a pesar de no tener el encanto de Buenos Aires sorprenderá por su ambiente moderno y próspero. Mientras que la ciudad es totalmente accesible para el viajero, pues habrá llegado al país principalmente a través del aeropuerto de la capital, otro punto menos cómodo es la Isla de Pascua. Sin embargo, siempre que se disponga del presupuesto necesario, merecerá la pena adentrarse en este lugar de belleza rara y melancólica, hogar de las famosas y enormes estatuas conocidas como "moai".

• Imprescindible será también pasar unos días en la comunidad costera de Valparaíso (capital legislativa de Chile), comer marisco en sus estupendos restaurantes, pasear por sus calles de casa de colores, y subir a cualquiera de las colinas sobre las que se asienta la ciudad para obtener estupendas vistas del puerto. Su Casco Histórico fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Y aquellos que no entienden una comida sin un buen vino, deberán acercarse al Valle de Colchagua, situado a 150 kilómetros de Santiago, un lugar que ofrece a los amantes del buen vino magníficas oportunidades para visitar bodegas y disfrutar catando los caldos locales.

• Los amantes de las playas tendrán que ver en Chile las inmediaciones de La Serena, un pintoresco municipio cuyo casco antiguo cuenta con un importante número de casas coloniales. Para bucear, qué mejor que visitar la Isla Robinson Crusoe, un paraíso con probablemente los mejores fondos de todo Chile. Ya en la superficie de la isla, perteneciente al Archipiélago Juan Fernández, habitan escasamente 500 personas que se dedican a la pesca. Los viajeros disfrutarán de excelentes langostas frescas y paseos por el bosque primario que la cubre.

• Desembarcar en la isla del Cabo de Hornos, uno de los lugares más mágicos y también de más difícil acceso de la tierra y visitar el Parque Nacional Nevado, uno de los mejores lugares de Chile para ver animales, serán otras actividades que podrán realizarse si se disponen de más días.