¿Qué ver en Mali y Burkina Faso?

Lo que tienes que hacer y ver en Mali y Burkina Faso

• Mali está lleno de nombres míticos que nos hacen soñar con tiempos de caravanas y grandes imperios. Uno de esos nombres es Tombuctú. La ciudad a la que llegaba y desde donde partía el comercio del África occidental es un monumento medieval y uno de los principales lugares que ver en Mali.

• Realizar un safari en alguno de los parques nacionales o reservas del Burkina Faso. Especialmente recomendable es la reserva Nazinga.

• Asimismo, merece la pena contemplar uno de los grandes monumentos del país, la gran mezquita de Djenné, y callejear entre sus casas de adobe llenas de adornos árabes y minaretes. En las inmediaciones se puede visitar Jennéjeno, yacimiento arqueológico que supuestamente fue el primer asentamiento urbano de Mali y de toda África. Para visitarlo, es especialmente recomendable viajar a Djenné en lunes, coincidiendo con el mercado semanal que aporta a la visita un enorme colorido y dará oportunidad al viajero de poner a prueba sus habilidades comerciales.

• Fotografiar la mezquita de barro de Bobo-Dioulasso, la más famosa de Burkina Faso y un raro ejemplo de arquitectura tradicional africana de estilo sudanés. En la misma ciudad, también es interesante acercarse al Jardín Botánico y al mercado de cerámica.

• Bobo-Dioulasso es conocida, además, como la capital de la música en Burkina y casi todas las noches es posible disfrutar de interesantes conciertos de djembé o balafon.

• Imprescindible será, también, hacer senderismo por el País Dogón y sus montañas. Para descansar, visitar alguna de las aldeas de la zona de Youga. Begnimato, en la meseta, ofrece espectaculares vistas de la región. Asimismo, la ciudad de Gao, en medio del desierto, es otra de las joyas de Mali: en sus inmediaciones se puede visitar la duna rosa de Koyma y, algo más al suroeste, el monte Hombori, la cima más elevada del país.