Sudáfrica es un país de una enorme exuberancia natural y, por ello, no extraña que los safaris en Sudáfrica sean una de las máximas atracciones locales.
Sin duda, el Parque Kruger es el lugar con más renombre a la hora de realizar safaris en la república africana.
Situado en Mpumalanga (a unos 400 kilómetros de Johanesburgo), el gigantesco parque te permitirá observar muy de cerca a los denominados "cinco grandes" (elefante, leopardo, león, rinoceronte y búfalo).
Uno de sus mayores atractivos es que el cercano aeropuerto de Mpumalanga lo hace bastante accesible desde las principales ciudades sudafricanas, facilitando el viaje y la visita.
Desde el año 2000, el Parque Kruger se ha integrado en el titánico Parque Transfronterizo del Gran Limpopo, uniéndose a dos de los mayores parques nacionales de Zimbaue y Mozambique: Gonarezhou y Limpopo. No te preocupes, por tanto, si tú quieres ir al parque Kruger y alguien te ofrece llevarte al Gran Limpopo.
Además de los safaris en el Parque Kruger, Sudáfrica es rica en otras experiencias relacionadas con la fauna y los "big five" africanos, como la de acercarse a los agresivos hipopótamos y cocodrilos en Isimangaliso.
Ya fuera de la sabana, Sudáfrica se postula como uno de los mejores países del mundo para ver ballenas gracias a la presencia de Hermanus.
La localidad pesquera de Hermanus, próxima a Ciudad del Cabo, está considerada como uno de los "spots" más privilegiados para la observación de ballenas y otros cetáceos.
No te la deberías perder si viajas a Sudáfrica, un país que, como ves, no ofrece únicamente ofrece Safaris en su catálogo.