En algunas ocasiones durante un viaje, por mucho que se haya leído la Lonely Planet, uno se encuentra con paisajes inesperados que te hacen disfrutar doblemente. Tanto por la belleza intrínseca del sitio como por la sorpresa.
En el corazón de Turquía (Anatolia central), camino de la Capadocia, encontramos un lago salado enorme de aspecto similar a los que se pueden ver en los viajes a Bolivia (Uyuni) o en viajes a Chile (Atacama).
Se llama “Tuz Gölü” (Lago de Sal) y tiene nada más y nada menos que 1.500 kilómetros cuadrados. La parada y la foto eran obligatorias.