¿Cómo es Florencia?

Características de Florencia

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• La ciudad está repleta de museos de muchísimo interés. Conviene priorizar si tenemos poco tiempo y no queremos que el viaje resulte agotador.

• Los italianos son, en general, gente amable y simpática. Eso sí, con mucho (a veces demasiado) olfato para los negocios, lo cual no suele ser muy bueno para el bolsillo del turista despistado. Por ejemplo, para tomar un café rápido en los locales cerca de la catedral, es mejor sentarse en la barra y no en una mesa, en la que cobran el doble.

• La comida en Florencia hará disfrutar de lo lindo a los amantes de la gastronomía italiana. Además de la pasta y la pizza (muy buena también si la compramos al taglio en una panadería), la cocina Fiorentina tiene especialidades propias como los crostini (tostadas untadas de queso u otros condimentos que se toman como entrantes); la tripa alla fiorentina (guiso de callos, para los más atrevidos), la bistecca alla Fiorentina (chuletón) o la porqueta (cerdo asado relleno de especias y que se come en un panini).

• Italia en general suele sorprender negativamente por lo descuidada. Florencia no es una excepción a esto, y fuera de las zonas más turísticas se encuentran calles sucias y olores desagradables.

• La Basílica de San Lorenzo es el templo más antiguo de Florencia. Era la iglesia de la familia Medici, mecenas de los artistas renacentistas en Florencia y responsables del apogeo de la ciudad en los siglos XIV a XVI. La Capilla de los Medici, en el mismo complejo, alberga el panteón de la familia, con varias esculturas de Miguel Ángel, así como una biblioteca con una imponente escalera.

• Florencia posee numerosas iglesias monumentales, museos y palacios. La catedral (il duomo) de Santa Maria del Fiore con su campanario de Giotto, junto con las iglesias de Santa Croce, Santa Maria Novella y San Miniato al Monte son ejemplos únicos y maravillosos de la arquitectura románica Fiorentina.