¿Qué ver en Bratislava?

Lo que tienes que hacer y ver en Bratislava

• Cruzar el puente nuevo y pasear por el parque del Danubio (Hla Janka). Allí se encuentran dos restaurantes muy recomendables: Aucafé, que ofrece platos novedosos de la nouvelle cuisine, y Leberfinger, donde podemos degustar la gastronomía típica eslovaca.

• Recorrer el centro (la plaza principal –Hlavné námestie-, la calle Michalská llena de restaurantes, tiendas y galerías) y subir caminando al castillo, desde donde se contemplan las dos realidades de Bratislava enfrentadas por el río: a un lado la parte histórica, y al otro el barrio de Petrzalka.

• Entre los muchos monumentos y atractivos turísticos de Bratislava cabe destacar la Torre de San Miguel, La catedral de San martín o el Museo nacional.

• La presa de Cunovo, en cuyas orillas se encuentra una zona de recreo con uno de los canales de aguas bravas artificiales más grandes de Europa. Allí también está el museo de Arte Moderno, la Danubiana Meulensteen Art Museum.

• Con la caída del comunismo, los eslovacos descubrieron el gusto por las terrazas, los bares y los restaurantes, y Bratislava es una prueba de ello: aquí se encuentran locales que no envidian nada a sus equivalentes de Londres, París o Berlín.

• En un viaje a Bratislava no se puede dejar pasar la oportunidad de saborear las estupendas (y baratas) cervezas eslovacas y de la vecina República Checa.

• Unas vacaciones en Bratislava son una buena oportunidad para salir por la noche y divertirse dado el estupendo ambiente y el gran número de tabernas y clubs que posee. El área más concurrida es el casco antiguo.

• Sin alejarse mucho de Bratislava, las riberas del Danubio constituyen un excelente paseo en bicicleta, patines o a pie, y también es posible hacer una excursión en barco.

• El viaje en tren hasta Viena dura apenas una hora y, si se disponen de tres o cuatros días, merece la pena dedicarle uno a la capital austríaca.